Esta pareja no dejó de sorprendernos en ningunas de las tres fases de la boda. Y lo mejor de todo, que en todo momento no dejaron de sonreir.
Antonio y Arabia son una pareja muy cercana y sencilla, y desde el minuto uno sabíamos que iba a ser muy fácil trabajar con ellos. Y así fue….. Siempre dispuestos a todo lo que le proponíamos y nosotros encantados.
Una mañana de otoño se casaron en el Cortijo El Madroño, en una ceremonia preciosa en la que estuvieron arropados por todos los allí presentes. Una boda muy, muy divertida y con sorpresas, sobre todo una que Arabia le hizo a Antonio que nos dejó a todos con las boca abierta.
Y no pararon de sorprendernos, pues a la hora de la postboda quisieron pasear su amor por el Cabo de Gata vestidos de manera diferente, y la verdad, es que quedó una postboda super original.
Nos encanta nuestro trabajo por como es, por como es la gente con la que trabajamos, porque cada boda es una historia diferente, aunque haya gente que piense que todas son iguales. Cada boda es una aventura.
Las bodas en otoño son preciosas y esta lo fue, no sólo porque el tiempo acompañó ,sino porque fue preparada con tal cariño y esmero que al final quedó una boda en la que todos y cada uno de los invitados participaron muy activamente en ella.
A Sergio le tenemos un especial cariño, ya que ha trabajado con nosotros en muchas ocasiones, siendo compañero en días de boda en el que él venía como videógrafo. Muchas risas y muchas cosas vividas en esas horas de trabajo. Y que decir de Irene, la chica de la eterna sonrisa, la amante de los perros, tan cercana y genial. Que hace una pareja perfecta con Sergio.
Toda la boda se desarrolló en La Hacienda El Juncal, que se engalanó esa mañana de octubre para que todos disfrutaran de la boda de esta pareja.
Y nos fuimos de postoboda a un sitio en el que nunca habíamos estado y que para ellos tenía un especial interés, ya que han pasado horas y horas disfrutando de esa playa con su precioso Mimo, este labrador que es todo un amor. Y nos encantó esa tarde que pasamos en Marbella con Irene y Sergio y entre risas, poses y más risas terminamos la sesión sin casi darnos cuenta.
He aquí un pequeñísimo resumen de estos dos grandes días vividos con Sergio e Irene.